El amor puede surgir en Mundo Coprográfico en los lugares y situaciones más inverosímiles, como por ejemplo, en la encarnizada pugna que cada cuatro años suponen las Olimpiadas de tu Puta Madre. En esta ocasión, la gimnasta rítmica más famosa de Coproldavia quedó prendada de la virilidad y valor de los dos plusmarquistas más reconocidos de la Zona Alfa, y como buena homocochleafílica y lectora de "Viva el Fornicio" que era, no tardó en impregnar a ambos héroes deportivos de flujos y salivas.
1 comentario:
Gracias, L, gracias... Si no llega a ser por tu habilidad para tomar las instantaneas más jugosas, la dictadura China nos habría censurado esto también (no sería la primera vez).
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